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jueves, 4 de abril de 2013

Héroes veteranos de guerra británicos se ven obligados a vender sus medallas

Las dificultades económicas obligan a algunos veteranos británicos a vender sus condecoraciones para sobrevivir. 

El piloto Branse Burbridge defendió el Reino Unido contra el nazismo durante la Segunda Guerra Mundial. A pesar de que al principio de la contienda se declaró objetor de conciencia, terminó convirtiéndose en héroe de guerra y en protagonista de una de las gestas más excepcionales del conflicto cuando en una sola de sus misiones nocturnas derribó a cuatro aviones alemanes.


Cuentan que Burbridge nunca apuntaba a la cabina de los aviones, solo a los motores, esperando que así se salvara el piloto, y le tranquilizaba ver que se abría el paracaídas del piloto enemigo.

Ahora tiene 92 años, sufre alzhéimer y vive en una residencia para ancianos. Para pagar su estancia allí su familia se vio obligada a subastar algunas de sus pertenencias: la cazadora, el diario de vuelo e incluso las medallas.



Sarah Christine, hija de Branse Burbridge: “Le dije: 'Mira, papá, son tus medallas y queremos venderlas'. Él sonrió, y en su sonrisa se veía que las reconocía como suyas. Estoy segura de que entendía lo que pasaba.”

La familia espera conseguir más de 100.000 libras por las medallas y con ese dinero poder pagar el asilo, que cuesta casi 50.000 libras al año. Por una parte es una opción que puede ayudar a la familia, pero por otra pone en evidencia que los recuerdos tienen un precio.

“Una de cada diez personas sin hogar es ex militar” 

No es un caso único: a esta medida se ven obligados a recurrir los allegados de muchos veteranos. Aunque es cierto que estos reciben una pensión libre de impuestos, la vida es tan cara que esa asignación a veces no alcanza ni para pagar la calefacción o la comida. Incluso se estima que una de cada diez personas sin hogar es ex militar.

Ann-Mari Freebairn, del Fondo de Previsión para la Real Fuerza Aérea (RAF Benevolent Funds): “Anualmente nos contactan cientos de ciudadanos, veteranos y personas que dependen de estos, que necesitan ayuda. Como la población envejece, no parece que el número de los que reciben nuestra ayuda vaya a reducirse en un futuro próximo.” El creciente número de conflictos en los que se ha visto involucrado el Reino Unido tampoco permite ser muy optimista respecto a una disminución del número de veteranos.

A los políticos les gusta conmemorar las gestas bélicas, pero en cambio olvidan a aquellos que las protagonizaron. Los veteranos de guerra británicos libran hoy en día una nueva lucha. Y al parecer esta no difiere mucho de la que se llevaba a cabo en los campos de batalla de los años 40. Hoy, como en aquella época, luchan para sobrevivir. Pero ahora no tienen más remedio que vender sus pertenencias y todo aquello por lo que lucharon y dedicaron sus vidas.

lunes, 25 de marzo de 2013

Suministros aéreos en al Alzamiento de Varsovia

El 1 de agosto de 1944 ante la inminente llegada de las tropas soviéticas el Armia Krajowa se lanzó a la reconquista de su capital en un intento de establecer una posición política que impidiese a Stalin hacerse con las riendas del país, como luego pasó finalmente.
Rápidamente las unidades polacas se hicieron con amplías zonas de la capital pero otras permanecerían en manos alemanas y lo que se suponía una breve batalla se convirtió en un pulso donde los insurgentes intentaban resistir y mantener sus posiciones frente a los cada vez mas duros ataques germanos. Las unidades del Armia Krajowa habían planteado luchar por la ciudad un par de días no más de cuatro y a cada jornada que pasaba sus problemas de falta de suministros, (especialmente armas contracarro) se hacían mas acuciantes.

Intentando paliar esta situación rápidamente el gobierno polaco en el exilio organizó un sistemas de lanzamientos de suministros, con la ayuda de los ingleses, utilizando los aparatos del 1586º escuadrón de la PAF estacionado en Bari y Brandisi. Ante la insistencia de los polacos, los británicos se unieron a los lanzamientos con los Liberators basados en Foggia de los escuadrones 31 y 34 de la SAAF y los Halifax de los escuadrones de la RAF nº 148 y 178. Estos vuelos continuaron con más o menos frecuencia hasta el 21 de septiembre contabilizándose el lanzamiento de unas 104 toneladas de suministros.
 
Liberator 1586º escuadrón de la PAF
Durante los vuelos uno de los principales problemas con los que se encontraban las tripulaciones aliadas era el largo trayecto que les llevaba desde el sur de Italia a Varsovia, limitando el peso de la carga que podían transportar y el número de salidas. Paradojicamente, el territorio ocupado por las tropas soviéticas y susceptible de ser usado como base para los aviones se encontraba al otro lado del Vistula, con lo cual de ser usado, se podría reducir el tiempo de vuelo a menos de una hora e incrementar los lanzamientos de una manera más que significativa, incluso, disputando el espacio aéreo a la ya muy debilitada Luftwaffe.

No obstante y atendiendo a razones puramente políticas, la Unión Soviética denegó la autorización para el uso de sus aeropuertos o espacio aéreo, refiriéndose el 22 de agosto a las tropas polacas como “un puñado de criminales”.
 
PIAT lanzado en paracídas
Viendo el limitado éxito de los escuadrones implicados las autoridades polacas dirigieron sus esfuerzos diplomáticos a los norteamericanos. El 6 de agosto el embajador de Polonia solicitó al Teniente General McNarney que presente una petición urgente del presidente de la república con los suministros y necesidades de los combatientes del Armia Krajowa. El escrito urgía por la autorización del general Eisenhower al incremento de los envíos y la participación de sus aparatos en los vuelos sobre Varsovia. Como respuesta el 7 de agosto la Junta de Jefes del Estado Mayor declaró que " el Embajador de Polonia debe ser informado que su apelación tiene la mas favorable consideración y que el asunto ha asido remitido al CCS (CombinedChiefs of Staff). Como anexo se señalaba que dada la responsabilidad británica en el equipamiento de las unidades poalcas debía ser la sección británica del CC2, (British Chiefs of Staff) quien se encargara de transmitir la propuesta.

En otro frente de presión diplomática, tras las objeciones de Stalin, Churchill telegrafía a Roosevelt, mucho más conciliador, responde el 26 de agosto:. "No considero que sea ventajoso dada la perspectiva de una guerra larga unirme a ti en este “mensaje” al tío Joe”.

Aunque la defensa aérea alemana sobre el área de Varsovia era casi inexistente, alrededor del 12% de los 296 aviones que participaron en las operaciones se perdieron al sobrevolar 1600 Km de territorio enemigo en unos terroríficos viajes de ida y regreso. En cuanto a su efectividad, la mayoría de los lanzamientos se hicieron durante la noche, a no más de 100-300 pies de altura, con la consecuente baja precisión que dejó muchos de los paquetes lanzadas en manos alemanas.
 
 

El 13 de septiembre, tras mas de un mes de combates, los soviéticos iniciaron sus propios lanzamientos. Inicialmente estos suministros fueron arrojados en contenedores sin paracaídas que provocaban graves daños en el armamento. Durante las siguientes dos semanas, las Fuerzas Aéreas soviéticas realizaron 2535 misiones con pequeños aparatos tipo Polikarpov Po-2, hasta el 28 de septiembre.

El 18 de septiembre finalmente se consiguió el acuerdo con las autoridades comunistas y 110 B17 de la USAAF pertenecientes a la 8ª Fuerza Aérea dentro del marco de la operación Frantic salieron de Inglaterra con 1248 contenedores en sus bodegas. Sobrevolaron Varsovia a pleno día dejando en manos de los insurgentes unos 250 repletos de material. Tras aterrizar en zona rusa, se aprovisionaron de bombas y combustible dirigiéndose a Italia. Durante la ruta se aprovecho el viaje de retorno para bombardear unas instalaciones ferroviarias en Budapest.
 
Insurgentes del AK contemplan los lanzamientos americanos
Hubo una gran presión en círculos del alto mando aliado para aprobar una segunda misión por parte de la USAAF. El Primer Ministro Polaco en el exilio,  Stanisław Mikołajczyk, llamó a Churchill para que apelase nuevamente a Roosevelt. Sin embargo, a pesar de dar el permiso para su realización nunca se llegaría a producir, Stalin se negó formalmente y la ciudad se rendiría el 3 de octubre de 1944.
 
Se estima que la RAF y la SAAF perdieron un aparato por cada tonelada de suministros entregados, siendo un total de cuarenta y un los aviones aliados destruidos de los 306 enviados. En 1992, 67 ex miembros de las escuadrillas 31 y 34 fueron galardonados con la Cruz Polaca del Alzamiento de Varsovia por su papel en apoyo de la sublevación.
 
Como todos sabemos, finalmente está ayuda quedó en nada debido a que los rusos se tomaron un tiempo demasiado precioso como para que los alemanes se rearmaran, reorganizaran y aplastaran, con una brutalidad, inusitada, toda la ciudad. De esta manera, los rusos consiguieron que la mayor parte del trabajo sucio de acabar con la resistencia polaca fuera realizado por los nazis, teóricamente sus enemigos. Cuando reanudaron la ofensiva, no encontraron resistencia en el frente y por supuesto en la Armia Krajowa. El Comunismo se instauro en Polonia hasta la caida del muro de Berlín.
 
Gracias a:
 
 

miércoles, 13 de marzo de 2013

Coleccionismo de la Segunda Guerra Mundial

Durante mis búsquedas por Internet a veces se hacen hallazgos que merece la pena visitar. Es el caso de Militaria: http://alexmilitaria.com/, el sitio web de un apasionado y estudioso de la Segunda Guerra Mundial, además de objetos y reliquias de esa época de la historia de Europa, para la mayoría negra, pero que siempre levanta pasiones entre historiadores.

Aquí encontraras de todo (si es que existe y es real y no una falsificación). Con gran aplomo y descripción nos habla de cascos, armas, pertrechos, uniformes, medallas, condecoraciones, utensilios y demás objetos de la Segunda Guerra Mundial.



Esta web, que ha estrenado sitio en wordpress, no os defraudará amantes de la historia.