Recientemente se ha anunciado el descubrimiento de 400 páginas de los diarios de Alfred Rosenberg, uno de los principales ideólogos del III Reich y ministro de los territorios ocupados en el este de Europa. Millones de civiles fueron asesinados, esclavizados, represaliados y encarcelados bajo su mandato. Tras la guerra Rosenberg fue juzgado en los juicios de Nuremberg (1945) y ahorcado (1946).
Alfred Rosenberg (codoh.com).
Sus diarios fueron sacados de Nuremberg y llevados a EEUU a escondidas por Robert Kempner, uno de los fiscales. Posteriormente utilizó algunos extractos para sus memorias. Tras su muerte en 1993, la familia cedió varias cajas con documentación, pero varios cientos de páginas no aparecieron hasta ahora. Estaban en la casa de un academico relacionado con la secretaria de Kempner.
La Segunda Guerra Mundial vivió una de sus últimas batallas en Europa, la derrota era inevitable para el III Reich, ya no le quedan aliados, apenas producen material bélico y las reservas de combustible están bajo mínimos. No hay casi nada de lo que fue la Kriegsmarine ni la Lutfwaffe. El ejército rojo se dirige hacia Berlín imparable y lo más rápido posible para capturar la mayor riqueza y tecnología posible. Hitler enajenado completamente ordena contraataques imposibles y misiones suicidas en la que se pierden miles de vidas alemanas. No obstante los alemanes luchan con todas sus fuerzas cegados por el fanatismo y conscientes de las ganas de venganza del ejército rojo.
- Guerra: II Guerra Mundial.
- Batalla: La Batalla de Berlín.
- Fecha: 16 de Abril de 1945 - 2 de Mayo de 1945.
- Lugar: Berlín, Alemania.
- Resultado: Victoria Soviética y fin de la guerra en Europa.
- Clave: Declive alemana, inferioridad en numero, armamento y suministros.
El intenso avance hacia Berlín por parte del ejercito rojo hacia ver la incapacidad alemana para frenarlo a pesar del empeño de sus hombres. Cada vez tropas menos experimentadas e incluso sin apenas entrenamiento eran incorporadas a las filas alemanas, la falta de recursos humanos en el ejercito alemán era visible. El 20 de Abril cumpleaños de Hitler, la artillería rusa alcanzaba Berlín. Hitler planteo otra de sus estrategias imposibles, según la cual se debería envolver al frente norte del ejército soviético algo que resultó imposible. Dos días mas tarde Hitler por fin comprendió que todo estaba perdido. Tropas alemanas y civiles que se encontraban al oeste de Berlín, decidieron entregarse a los estadounidenses con el fin de evitar caer en manos soviéticas. El día 24 Berlín estaba totalmente sitiada, era casi imposible salir de la ciudad para cualquier soldado o civil alemán.
Tanque aleman defendiendo la ciudad
Ya solo quedaba ocupar la ciudad, esta era defendida por todo tipo de hombres: ancianos y niños, desde las juventudes hitlerianas, hasta veteranos de la I Guerra Mundial, pasando por ancianos, policías, mujeres, divisiones aisladas de la Wehrmacht y unidades de las SS. Puntualizar que la Legión Azul española también estuvo representada incluso hasta el final de la batalla en el bunker del propio Hitler. La ciudad debía ser tomada casa por casa, aunque para facilitar las cosas se bombardeaban con artillería y aviación los edificios y se barrían las azoteas con ametralladoras. La lucha se desarrollaba principalmente en los edificios, las calles eran evitadas en la medida de lo posible, y el metro de Berlín se convirtió en la salvación para muchos civiles, aunque hubo alguna matanza. Hay alguna inundación de zonas del metro.
Reichstag en ruinas durante la batalla
El día 27 de Abril los alemanas solo conservaban el centro de la ciudad, y un día mas tarde los rusos llegaban hasta las cercanías del Reichstag cerca ya del bunker en el que se alojaba Hitler (donde pasó los últimos meses de la guerra), allí los combates seguirían la tónica de toda la batalla, cada edificio costaba vidas para ambos bandos y a medida que aumentaba la presión rusa a las fuerzas alemanas, estas más a fondo se empleaban. El día 29 de abril, los rusos comienzas a ocupar posiciones por del centro de Berlín. Hitler por su parte había mostrado su voluntad de no abandonar Berlín, algo a esas alturas imposible y se casa en el bunker con Eva Braun.
El ansia de las tropas rusas y la disputa de sus generales que dirigían diferentes frentes, por la gloria de la victoria ralentizan algo el avance soviético, el día 30 continúan los ataques, Hitler y su esposa antes de ser apresados se suicidan al igual que muchos generales alemanes en el bunker y sus cadáveres son quemados. Las tropas soviéticas alcanzan el Reichstag donde se libran fieros combates durante horas, la noche del 30 los soldados rusos consiguen izar una bandera en lo alto del edificio, pero la resistencia alemana continuaría hasta el día 2 de Mayo cuando cayeron las ultimas unidades defensoras que aun aguantaban en alguna sala aislada. El generalHans Krebs es enviado para negociar una rendición, pero los soviéticos tan solo aceptan una rendición incondicional.
Bnadera sovietica ondeando en lo alto del Reichstag
Con todo perdido la mayoría de defensores de Berlín a los que se les unieron varios miles de civiles, intentan huir para rendirse en zona americana pero, la mayoría de ellos son abatidos o capturados. Tan sólo logran llegar unos pocos cientos a su objetivo. El día 2 de madrugada los rusos asaltan la Cancillería del Reich y ese mismo día a las 8:45 horas se acepta la rendición alemana de Berlín aunque no seria hasta el 8 de Mayo cuando el alto mando alemán se rinde de manera incondicional en todos los frentes. La II Guerra Mundial que había supuesto el mayor desastre de la historia de Europa había llegado a su fin.
Tras la batalla los soldados soviéticos se dedicaron a calmar sus ansias de venganza por el trato sufrido por las fuerzas alemanas en el frente del este, y más de 100.000 mujeres y niñas fueron violadas, muchas de ellas repetidas veces, llegándose a suicidar el 10% de ellas. Durante la guerra se estima que en torno a 2.000.000 de mujeres alemanas fueron agredidas sexualmente.
Niños reclutados para la defensa de Berlin
Periódico americano informando de la muerte de Hitler
Bandera soviética ondeando en las calles de Berlin
Mujer alemana recibiendo instrucción
Civiles reclutados para la batalla
Ultima imagen conocida de Hitler condecorando a unos niños por sus méritos en combate
Uno de los episodios más citados de la Segunda Guerra Mundial es la muerte de Adolf Hitler el 30 de abril de 1945. Según la historia oficial, Hitler se habría suicidado junto con su esposa, Eva Braun, al llegarle las noticias de que los soviéticos estaban a metros del búnker en el que se refugiaba tras el incesante avance de los Aliados.
En abril de 1945, Hitler se trasladó al Führerbunker debajo de la Cancillería de Berlín, un complejo subterráneo de dos pisos y unas treinta habitaciones. Desde entonces, comenzó a recibir información de la derrota de sus generales, culpándolos de mentirosos, cobardes y traicioneros.
A medida que las noticias del derrumbamiento nazi llegaban al búnker, se dice que Hitler comenzó a desarrollar una aguda paranoia e histeria, mientras quemaba documentos y se preparaba para el final.
Se le dio permiso al personal para abandonar el refugio, la mayoría lo hizo, pero junto a Hitler quedaron algunos miembros del personal, Eva Braun, Joseph Goebbels junto a su familia entera, militares de la SS, Martin Bormann, y dos de las secretarias personales de Hitler.
El 28 de abril, tras las deserciones de Himmler y Göring, Hitler hizo redactar su testamento personal y político, dejando las últimas indicaciones y acusando a los judíos de todo lo ocasionado por última vez en su vida.
Antes de la medianoche, se casó con Eva Braun, en una ceremonia civil perpetuada a último momento dentro del búnker.
El 29 de abril, los rusos se encontraban a una milla de distancia del búnker, y la noticia de la ejecución de su aliado Mussolini en Italia llegó a oídos del Führer. Decidido ya quitarse la vida, dio las pastillas de cianuro que poseía primero a su perro Blondi, al que asesinó por envenenamiento. Después repartió pastillas a sus secretarias, para que hicieran lo mismo.
El 30 de abril de 1945, luego de un frugal almuerzo, Hitler y Eva Braun saludaron por última vez a Bormann, Goebbels, y otros militares que permanecían en búnker. Se retiraron a su habitación y se suicidaron.
A las 3:30 Bormann y Goebbels encontraron el cuerpo de Hitler cubierto de sangre en el sofá, producto del disparo de su escopeta, mientras que Eva Braun yacía muerta por envenenamiento.
El 1 de agosto de 1944 ante la inminente llegada de las tropas soviéticas el Armia Krajowa se lanzó a la reconquista de su capital en un intento de establecer una posición política que impidiese a Stalin hacerse con las riendas del país, como luego pasó finalmente.
Rápidamente las unidades polacas se hicieron con amplías zonas de la capital pero otras permanecerían en manos alemanas y lo que se suponía una breve batalla se convirtió en un pulso donde los insurgentes intentaban resistir y mantener sus posiciones frente a los cada vez mas duros ataques germanos. Las unidades del Armia Krajowa habían planteado luchar por la ciudad un par de días no más de cuatro y a cada jornada que pasaba sus problemas de falta de suministros, (especialmente armas contracarro) se hacían mas acuciantes.
Intentando paliar esta situación rápidamente el gobierno polaco en el exilio organizó un sistemas de lanzamientos de suministros, con la ayuda de los ingleses, utilizando los aparatos del 1586º escuadrón de la PAF estacionado en Bari y Brandisi. Ante la insistencia de los polacos, los británicos se unieron a los lanzamientos con los Liberators basados en Foggia de los escuadrones 31 y 34 de la SAAF y los Halifax de los escuadrones de la RAF nº 148 y 178. Estos vuelos continuaron con más o menos frecuencia hasta el 21 de septiembre contabilizándose el lanzamiento de unas 104 toneladas de suministros.
Liberator 1586º escuadrón de la PAF
Durante los vuelos uno de los principales problemas con los que se encontraban las tripulaciones aliadas era el largo trayecto que les llevaba desde el sur de Italia a Varsovia, limitando el peso de la carga que podían transportar y el número de salidas. Paradojicamente, el territorio ocupado por las tropas soviéticas y susceptible de ser usado como base para los aviones se encontraba al otro lado del Vistula, con lo cual de ser usado, se podría reducir el tiempo de vuelo a menos de una hora e incrementar los lanzamientos de una manera más que significativa, incluso, disputando el espacio aéreo a la ya muy debilitada Luftwaffe.
No obstante y atendiendo a razones puramente políticas, la Unión Soviética denegó la autorización para el uso de sus aeropuertos o espacio aéreo, refiriéndose el 22 de agosto a las tropas polacas como “un puñado de criminales”.
PIAT lanzado en paracídas
Viendo el limitado éxito de los escuadrones implicados las autoridades polacas dirigieron sus esfuerzos diplomáticos a los norteamericanos. El 6 de agosto el embajador de Polonia solicitó al Teniente General McNarney que presente una petición urgente del presidente de la república con los suministros y necesidades de los combatientes del Armia Krajowa. El escrito urgía por la autorización del general Eisenhower al incremento de los envíos y la participación de sus aparatos en los vuelos sobre Varsovia. Como respuesta el 7 de agosto la Junta de Jefes del Estado Mayor declaró que " el Embajador de Polonia debe ser informado que su apelación tiene la mas favorable consideración y que el asunto ha asido remitido al CCS (CombinedChiefs of Staff).Como anexo se señalaba que dada la responsabilidad británica en el equipamiento de las unidades poalcas debía ser la sección británica del CC2, (British Chiefs of Staff) quien se encargara de transmitir la propuesta.
En otro frente de presión diplomática, tras las objeciones de Stalin, Churchill telegrafía a Roosevelt, mucho más conciliador, responde el 26 de agosto:. "No considero que sea ventajoso dada la perspectiva de una guerra larga unirme a ti en este “mensaje” al tío Joe”.
Aunque la defensa aérea alemana sobre el área de Varsovia era casi inexistente, alrededor del 12% de los 296 aviones que participaron en las operaciones se perdieron al sobrevolar 1600 Km de territorio enemigo en unos terroríficos viajes de ida y regreso. En cuanto a su efectividad, la mayoría de los lanzamientos se hicieron durante la noche, a no más de 100-300 pies de altura, con la consecuente baja precisión que dejó muchos de los paquetes lanzadas en manos alemanas.
El 13 de septiembre, tras mas de un mes de combates, los soviéticos iniciaron sus propios lanzamientos. Inicialmente estos suministros fueron arrojados en contenedores sin paracaídas que provocaban graves daños en el armamento. Durante las siguientes dos semanas, las Fuerzas Aéreas soviéticas realizaron 2535 misiones con pequeños aparatos tipo Polikarpov Po-2, hasta el 28 de septiembre.
El 18 de septiembre finalmente se consiguió el acuerdo con las autoridades comunistas y 110 B17 de la USAAF pertenecientes a la 8ª Fuerza Aérea dentro del marco de la operación Frantic salieron de Inglaterra con 1248 contenedores en sus bodegas. Sobrevolaron Varsovia a pleno día dejando en manos de los insurgentes unos 250 repletos de material. Tras aterrizar en zona rusa, se aprovisionaron de bombas y combustible dirigiéndose a Italia. Durante la ruta se aprovecho el viaje de retorno para bombardear unas instalaciones ferroviarias en Budapest.
Insurgentes del AK contemplan los lanzamientos americanos
Hubo una gran presión en círculos del alto mando aliado para aprobar una segunda misión por parte de la USAAF. El Primer Ministro Polaco en el exilio, Stanisław Mikołajczyk, llamó a Churchill para que apelase nuevamente a Roosevelt. Sin embargo, a pesar de dar el permiso para su realización nunca se llegaría a producir, Stalin se negó formalmente y la ciudad se rendiría el 3 de octubre de 1944.
Se estima que la RAF y la SAAF perdieron un aparato por cada tonelada de suministros entregados, siendo un total de cuarenta y un los aviones aliados destruidos de los 306 enviados. En 1992, 67 ex miembros de las escuadrillas 31 y 34 fueron galardonados con la Cruz Polaca del Alzamiento de Varsovia por su papel en apoyo de la sublevación.
Como todos sabemos, finalmente está ayuda quedó en nada debido a que los rusos se tomaron un tiempo demasiado precioso como para que los alemanes se rearmaran, reorganizaran y aplastaran, con una brutalidad, inusitada, toda la ciudad. De esta manera, los rusos consiguieron que la mayor parte del trabajo sucio de acabar con la resistencia polaca fuera realizado por los nazis, teóricamente sus enemigos. Cuando reanudaron la ofensiva, no encontraron resistencia en el frente y por supuesto en la Armia Krajowa. El Comunismo se instauro en Polonia hasta la caida del muro de Berlín.
Una de las fotos que más me ha impresiona de la caida a Berlín es una tomada al comandante de la guarnición nada más ser capturado. La expresión de las caras de 3 de ellos muestra un hundimiento total. Hay otro que todavía mantiene un gesto desafiante.
Copyright desconocido.
Los oficiales son, de izquierda a derecha:
- General de Artillería H. Weidling, comandante de la guarnición de Berlín y del LVI Panzer Korps - Teniente General K. Woytasch - Coronel H. O. Wöhlermann, comandante de artillería. - Teniente General Schmid-Dankward.
Merece la pena destacar que Woytasch y Schmid-Dankward estaban retirados cuando Weidling les llamó. Quizás quería contar con oficiales leales y conocidos, o igual no había otro remedio. En cualquier caso, fue una faena porque tras su captura pasaron varios años de prisioneros en la URSS. Una curiosidad, debajo de la la Cruz de Hierro alemana de Weidling se puede ver una insignia de los Zeppelin, y es que en la Primera Guerra Mundial sirvió en un batallón de Zeppelin.
La ciudad de Volgogrado, en Rusia, volvió a llamarse por un día, "Stalingrado", para recordar el fin de la batalla más sangrienta de la historia de la humanidad. Setenta años se cumplen del fin del cerco de la ciudad, en la que murieron cerca de dos millones de personas, la mayoría civiles, y que supuso el principio del fin del tercer Reich. 20.000 personas participaron en el homenaje que conmemora los más de doscientos días en los que rusos y alemanes pelearon, lucharon y murieron, calle a calle por el control de esta ciudad que terminó en ruinas.
En la víspera, los veteranos de la batalla de Stalingrado se visten con sus uniformes para la celebración. EFE Desfile militar para conmemorar tan señalada fecha.
El presidente ruso, Vladimir Putin, recordó hoy el 70 aniversario de la victoria de las tropas soviéticas en la batalla de Stalingrado. (Reuters)
Las calles de Volgogrado recuerdan la batalla, en la imágen un carro de combate T-34.
Veterano de la batalla acompañado de familiares.
Un tanque T-34 en el desfile militar, por las calles de 'Stalingrado' de nuevo.
Las tropas volvieron a vestir el uniforme de soladado de 1942-1943.
Gracias a una resolución dictada por la administración de la ciudad, Volgogrado será renombrada temporalmente Stalingrado para conmemorar la victoria de la Unión Soviética en la batalla de 1943 que quebró el poder de la invasión alemana.
Este año, la famosa ciudad a orillas del río Volga conmemora el 70º aniversario del final de la decisiva Batalla de Stalingrado de la Segunda Guerra Mundial. Las celebraciones del jueves incluyeron una reconstrucción del momento cuando el General Paulus, que comandaba a las fuerzas alemanas, salió de su búnker para rendirse.
A partir de ahora, Volgogrado será referida como Stalingrado en los actos oficiales del 2 de febrero, el día en que se entregaron las últimas fuerzas del Eje; también el 9 de mayo, día de la victoria; el 22 de junio, día de luto y memoria; el 2 de septiembre, señalando el final de la Segunda Guerra Mundial; el 23 de agosto, que conmemora a los muertos en los bombardeos alemanes en Stalingrado; y el 19 de noviembre, el comienzo de la Operación Urano, mediante la cual los alemanes en la ciudad fueron cercados, según un comunicado publicado en el sitio web de la Duma de la ciudad de Volgogrado el miércoles.
Conocida como Tsaritsin bajo el régimen de los zares, la ciudad fue rebautizada Stalingrado en 1925. Su nombre fue cambiado una vez más a Volgogrado, en 1961, ocho años después de la muerte de Stalin.
También como parte de las celebraciones por el 70º aniversario de la ciudad se han preparado cinco "autobuses de Stalin", vehículos privados con fotografías del totalitario líder soviético. Los autobuses operarán hasta el 9 de mayo, el día en que Rusia conmemora la derrota de Alemania.
La decisión de ocasionalmente devolverle el nombre de Stalingrado a la ciudad se debió a la presión hecha por los veteranos, dijo Sergei Zabendov, diputado de la Duma de la ciudad, según la declaración.
La batalla de Stalingrado, que duró desde agosto de 1942 a febrero de 1943, fue una de las más sangrientas en la historia del mundo, con hasta 2 millones de muertos o heridos.
La lucha en la cuenca del Volga fue también una de los primeras durante la Segunda Guerra Mundial en las que las pérdidas alemanas fueron similares a las sufridas por los soviéticos. Incluso en los combates cerca de Moscú, a finales de 1941 y comienzos de 1942, casi 10 soldados soviéticos murieron por cada soldado alemán caído en acción.
Hace unos días el diario El Mundo se hacía eco del 70° aniversario de la batalla de Krsany Bor, la más importante en la que participo la División Azul. Sobre esta unidad hay mucha historia y se puede encontrar mucha información en internet. Creada con el objetivo de ayudar a los alemanes frente a la URSS, fue enviada en 1941 al frente de Leningrado. Al contrario que las divisiones de otros aliados de Alemania, la Azul o 250 según la Wehrmacht operaba dentro de las Fuerzas Armadas alemanas. Y al contario que húngaros, rumanos e italianos, esta si demostró su valía y valentía.
Divisionarios con el diari Marca (copyright desconocido).
En total pasaron unos 45.000 soldados y oficiales. A pesar de los mitos hubo de todo: falangistas convencidos de que participaban en una cruzada contra el comunismo, aventureros e incluso comunistas y repúblicanos que se querían ganar el perdón y respeto en los duros años de posguerra. El contraste está bien representado por dos de sus más famosos veteranos. Jaime Milans del Bosch, general golpista del 23F y veterano del Alcazar; y Luis García Berlanga, que participó para salvar a su padre, político repúblicano.
A medida que se complicaba la guerra, el régimen franquista fue haciendo de menos la presencia de la divisón en el frente ruso. A finales de 1943 volvió a España. Allí dejaron 8.000 muertos y 547 prisioneros.
Hoy en día existen varios monumentos y cementerios conmemorando a la División Azul, incluso en Rusia. Los españoles no compartían la política racial de los alemanes, y veían al pueblo soviético como un rehén de los comunistas.
El peor destino se lo llevaron los prisioneros. Muchos de ellos murieron y los que lograron sobrevivir no regresaron a España hasta bien entrados los años 50. España no reconocía el régimen soviético y durante mucho tiempo fue un obstaculo insalvable para negociar el retorno. El retorno de los prisioneros en el barco Semíramis fue todo un acontecimiento que probablemente recuerdan los más mayores: